¡MARCHANDO!: UNA DE REY NEGRE AL NATURAL Y DOBLE DE GESTIÓN ANUAL EN ESCABECHE (Poco hecha)

Artículo de Opinión de Jorge Sedano. 

Me piden de algunos medios de comunicación que escriba y haga un balance de la gestión del Gobierno en el último año y yo, como soy facilón, pues digo que sí a la primera de cambio.

 ¿Balance de gestión? Bueno, ¡algo habrá! Algo habrá relevante, ¡digo yo! Un año da para mucho. Pero… ¡claro! surgen las dudas. -¡Hombre Jorge!- me pregunto, -algo bueno y decente habrá hecho el bipartito de marras en 365 amaneceres y otros tantos ocasos-  Y yo hago memoria y recuerdo… –el puente de Francisco Aura y el puente de Batoy, ¿se inauguraron este año o el pasado?-, pero inmediatamente caigo que estos proyectos no son del bipartito, sino de la legislatura anterior. Son de mi etapa ¡Manda carallo! -Además- me repite por segunda vez mi lado menos malévolo de la azotea -¿Cómo vas a hacer una crítica política dura si estamos en Navidad…-.

 -¡Pero Jorge!– me repica nuevamente la navideña vocecita interior -si es que es normal que el “Rey Negre” pintado, al natural, o en escabeche” se olvide de ti cada 5 de enero y te traiga carbón, calcetines, pañuelos y slips, en lugar de la moto de segunda mano que te pides todos los años.

-¡Por Dios, Jorge! No seas cínico- sigue increpándome mi vena navideña en off-. Y yo me digo -este artículo es más difícil de gestionar que el último brote de legionela-, que ¡por cierto! nadie sabe como vino y nadie sabe como se fue. Cuando yo gobernaba los brotes sí estaban claros: según la oposición en aquellos tiempos, (esos “del no a todo” que con sólo dos concejales mandan ahora más que “Mariano”). Pues eso, que parece ser que yo era el que por las noches, evidentemente con nocturnidad y alevosía, ponía la legionela en las fuentes, diluida en “polvos legionarios”. Curioso, pero en este último brote le pregunté a los de Izquierda Unida, que son ahora los que miman y cuidan nuestra agua desde el Gobierno, que me explicaran el foco de este último brote de la maldita legionela y me dijeron que ellos no tenían ni idea ¡Cómo es la vida!

 Bueno, a lo que vamos: a hablar de gestión y el año que viene Dios dirá ¡Anda!, ahora que lo pienso, no hay “año que viene” ¡Si son elecciones dentro de cinco meses!

 Hablando de gestión: ¿sabrían ustedes explicarme que ha sido de la urbanización de la Plaza de Al-azraq, de la Calle Calderón, (cortada desde hace más de  mil soles y tropecientas  lunas que cantaba Sabina) ¿Qué hay del PGOU, que se iba a terminar en sólo unos meses? ¿Quieren ustedes que preguntemos por  la reurbanización de Entenza, la manzana de Rodes, la Placeta de les Eres…? ¿Y del  “horno moruno” de la Calle San Juan que se cae a pedacitos? ¿Qué es del nuevo Cuartel de la Guardia Civil? ¿Y de la Colonia de Aviación?  ¿Y de…? ¿Y de la empresa agroalimentaria con tropocientos siete trabajadores que nos vendió el tripartito hace tres años? La lista es larga, pero no quiero ser cansino, por aquello de la Navidad, el Año Nuevo y lo del carbón del Rey Negro ¡Ya saben!

 ¡Hay lo que hay! Pero sería injusto quedarse sólo ahí, en proyectos incumplidos y olvidados, que los hay y muchos. No son tiempos para lanzarse trastos a la cabeza. Ni para continuar con el típico “y tú más”. Aunque algunos lo merecen.

 Quiero manifestar que, pese a que en los medios de comunicación  en ocasiones parece que todos estamos contra todos, políticamente hablando, eso, en Alcoy, no es cierto en absoluto. Opino que este año, y quiero enfatizarlo, todos los concejales del Ayuntamiento, sin excepción, hemos hecho un gran esfuerzo por estar a la altura de las difíciles circunstancias que nos rodean, y lo cierto es que se han aprobado por unanimidad muchísimos temas. Infinidad de asuntos importantes aprobados por todos.  Juntos hemos hecho un gran esfuerzo en esa dirección. A las actas plenarias me remito. Y es justo recalcarlo y además es mérito de todos y cada uno de los concejales.

 En honor a la verdad, y a modo de conclusión, primero reconocer que los tiempos son difíciles, que la gestión  por tanto es más compleja y que indudablemente no son momentos de grandes proyectos.

 En segundo lugar también matizar que el POSE, con siete concejales, se ha centrado mucho más en el trabajo y la gestión que sus socios de I.U, que con sólo dos concejales han hecho mucha política y poca gestión, anteponiendo siempre su programa político a los intereses generales de la ciudad. Esta posición egoísta y rígida del socio minoritario siempre amenazante con la posible ruptura del pacto, ha sido una pesada losa en la gestión diaria. Con amenazas de ruptura se puede sobrevivir, pero nunca gobernar con solvencia una ciudad como Alcoy.

 En cuanto a la gestión, en términos generales, creo que es manifiestamente mejorable la parcela de cultura, donde las crecientes críticas durante la legislatura son evidentes tanto por la pérdida de nivel, como por la falta de pluralidad, donde se ve la evidente mano ideológica de I.U.

En turismo decae la frescura en la iniciativa, así como se intuye una caída en la rutina. Lo siento, pero Fernando Pastor, mientras no se demuestre lo contrario, ha sido para mí, el concejal más innovador, creativo y resolutivo en esta parcela. Al César lo que es del César. Alcoy no es turístico sino industrial. Yo siempre pienso en la industria y no sólo en congresos, modernismo, camellos, casas rurales, hoteles, y senderismo pero esta parcela también es muy importante y proyecta imagen de Ciudad y por eso hay que cuidar y cultivar mucho más el turismo de interior. No es un asunto sólo de recursos económicos, sino de imaginación e ilusión.

Opino, también,  que en servicios sociales, además de la inmensa labor que están haciendo los técnicos del ayuntamiento, hay que reconocer la buena labor que está realizando Aroa Mira, que junto con Lucía Granados que gestionó los, también muy difíciles, 4 últimos años de mi Gobierno, han demostrado ser dos personas muy capacitadas y con una implicación personal en su trabajo digna de mención. Aquí, se trabajó y se sigue trabajando bien, mucho  y duro.

Creo que es de justicia reconocer también que, en Promoción Económica, Manuel Gomicia muestra una implicación evidente a nivel personal.. El Ágora está siendo un instrumento útil que, cuanto menos, intenta cumplir su objetivo como polo dinamizador. Además, en su discurso cotidiano, se nota en Manuel Gomicia una mayor contundencia que en otros compañeros de Gobierno por lograr que Alcoy-Innova (el proyecto de La Española) sea una realidad cuanto antes.

Al Alcalde recordarle que recibió un Ayuntamiento mucho mejor económica y administrativamente que el que nos cuenta a menudo. Pero también quiero reconocer que Antonio Francés, por su perfil técnico está siendo un buen concejal de hacienda. Pero también, indudablemente, el motivo por el cual el Ayuntamiento de Alcoy está mucho más sano que la inmensa mayoría de ayuntamientos de España se debe especialmente a la magnífica labor que en la última legislatura de mi Gobierno realizó Rafa Sanus como Concejal de Hacienda. Rafa ha sido uno de mis mejores  compañeros de viaje en la política: leal, previsor, austero y muy cualificado. Un lujo para el Ayuntamiento de Alcoy, Antes, y ahora.

 El resto de concejales  del PSOE da la impresión, y se entiende, que trabajan día a día, pero con la esperanza de que esta atípica y difícil legislatura termine cuanto antes. Son pocos concejales, todos han tenido que asumir sobrecarga de concejalías y se entiende que estén  cansados de unos socios que, en los temas importantes (Alcoy-Innova, Fiestas…), los abandonan a merced de la tormenta.

Han pasado casi 4 años. El discurso victimista del Gobierno Bipartito, especialmente por parte de I.U. no se lo creen ni ellos mismos. Mi balance, en términos generales (ni aún estando en Navidad) puede ser en absoluto positivo, ni el de este año, ni el de los anteriores. El tripartito fracasó y el bipartito es un fracaso a “grito pelao”. En la ciudad se palpa una pastosa y pasmosa sensación de inactividad próxima al “letargo”. La deslealtad de I.U con tan sólo dos concejales, así como sus constantes amenazas de abandonar el Gobierno si no se cumplen sus deseos, sumergen a la ciudad en una cotidiana e insana sensación de que el Gobierno está al borde de la ruptura.

Nuestro futuro no es nada fácil como ciudad, por no decir que es muy complicado. Aquello de “somos los mejores” era realmente verdad, cuando “Franco era Cabo”. Hoy o afinamos el rumbo, y remamos juntos y algunos se quitan la boina… o pintan bastos. No hay oportunidades claras para nuestros jóvenes, y los más preparados se buscan la vida lejos del Barranc del Cinc y vuelven a casa por Navidad (cómo El Almendro) y por Sant Jordi (con, o sin fin de semana), ¡qué mas da¡. Esa estéril polémica la dejan para los que seguimos aquí con nuestras sesudas batallitas de si son galgos o podencos. Hoy, y  me duele profundamente confesarlo, nuestra ciudad no sabe a que compite, ni contra quien. Este es un lujo que no nos podemos permitir. Esto es lo más parecido a una ruleta rusa ¡Y, lo más preocupante! vivimos en un desierto de voces críticas. No son tiempos de auto-bombo sino de auto-crítica. Constructiva, ¡claro!

Por cierto: (y también es balance) en este 2014 hemos perdido una de las pocas piezas “edilícas” que valían la pena. Me refiero a  Jordi Tormo, concejal de I.U. que dejó la política para volver a su trabajo profesional cotidiano. Jordi Tormo hombre con talento y con talante ha sido un lujo a nivel personal y político para mí. Te echo de menos Jordi.

 P.D. Si durante la Cabalgata les besa el Rey Negro y les deja la mejilla “sua i chorrant de colorins…” ¡tranquil, tranquila…! es el Nostre.  ¡Es el Negre de tota la vida, el autentic, el alcoia!

 Feliz año a todos.