El Encuentro cierra una participativa Semana Santa en Cocentaina
La Semana Santa de Cocentaina llegó a su fin en la madrugada del Domingo de Pascua con el tradicional Encuentro entre la Virgen María y Cristo Resucitado, un acto que de nuevo se llevó a cabo en el corazón del barrio del Raval. Fue tras la Vigilia Pascual de la Parroquia del Salvador, pasada la medianoche, y ante la presencia de numerosos fieles que no quisieron perderse un instante tan emotivo.
Hay que recordar que la jornada del Sábado Santo comenzó temprano en la Villa Condal con el rezo de laudes, tanto en la Parroquia del Salvador como en la de Santa María, recordándose así la soledad de la Virgen María tras la sepultura de Cristo. Además en los oficios religiosos se puso especial énfasis en la esperanza en la Resurrección que tuvo durante ese día la Mare de Déu. Ya por la tarde la actividad se trasladó a cada templo con la solemne y festiva Vigilia Pascual, la cual se llevó a cabo a partir de las 18:30h en el Monasterio de la Mare de Déu del Miracle mientras que a las 20:30h se efectuó en el Convento de los Padres Franciscanos instantes después de la bendición del fuego en la placita por parte del Guardián; Fray Fernando Fuertes Garrigós.
En la Parroquia del Salvador la Vigilia Pascual arrancó a las 22:30h, con también la bendición del fuego en la misma Placeta del Salvador, y en Santa María comenzó a las 23:00h destacando en ella la participación activa de todas las cofradías que tienen sede en este último templo. Como mencionábamos anteriormente, al finalizar la Vigilia Pascual del Salvador salió a las calles del Raval la imagen de La Dolorosa con la indumentaria de Pascua para encontrarse con Jesús Resucitado en pleno corazón del barrio. Volteo de campanas y silbatos protagonizaron un momento emotivo en el que no faltó el canto de la tradicional melodía Aranyeta, Aranyeta ix del forat, que el Nostre Senyor ja ha ressucitat.
La procesión del Encuentro acabó con el regreso de ambas imágenes al Salvador. Después hubo una chocolada para poner el punto y final a la Semana Santa.