Solo Japón tiene unas proyecciones demográficas de futuro más negativas que las españolas: Ante El Reto Demográfico, ¿Qué Hacer?
Artículo de Opinión de Quino Palací, Gerente y Director de Ideas de CREA360
La cuestión demográfica ha entrado de manera potente en el debate sociopolítico de este 2017 con la intención de quedarse y convertirse en un tema de conversación recurrente. La conferencia de presidentes autonómicos fue el primer foro donde se habló de manera clara del reto poblacional que va a tener que afrontar el Estado español en los próximos años y buena parte de los dirigentes regionales lanzaron un órdago al Presidente del Gobierno. Éste lo recogió constituyendo el Comisionado frente al Reto Demográfico.
Ahora bien, estamos ante un reto que no debe acabar siendo tema de conversación de barra de bar convirtiéndonos todos/as en creadores de opinión de la cuestión. Esta situación en la que nos encontramos va a repercutir directamente en el bienestar de las sociedades actuales, no en un marco temporal largoplacista, si no a corto y medio plazo con consecuencias muy palpables que serán dolorosas si no se actúa de manera planificada, consensuada y pertinente.
Tan solo dos datos para ilustrar la magnitud del reto. Solo Japón tiene unas proyecciones demográficas de futuro más negativas que las españolas. Si las proyecciones demográficas de futuro para España se cumplen, para la década de los cuarenta de este siglo, seremos en nuestro país 40 millones de habitantes frente a los 46 millones actuales. Pero ese no es el reto. El reto es que mas del 30% de esa población tendrá mas de 60 años con todo lo que ello implicará en materia de bienestar social, sanidad, servicios sociales y pensiones.
Ante estas cifras ya podríamos establecer una hoja de ruta para actuar de cara al futuro pero el reto demográfico no va a quedar ahí y en este sentido hay que señalar el problema de la despoblación de las zonas rurales e industriales maduras. No solo se va a generar pérdida de habitantes en los pequeños municipios de menos de 2000 habitantes sino que las ciudades medias de entre 50.000 y 70.000 habitantes de zonas interiores, con sectores productivos maduros, también van a sufrir un envejecimiento acentuado que será difícil de contrarrestar sin unas políticas de empleo más allá del sector servicios y público. Por último también hay que hablar de las zonas costeras, las cuales van a afrontar un reto poblacional importante, como es el asimilar y absorber con los servicios públicos de que disponen a la cantidad de personas extranjeras que se irán instalando cada vez más en estos espacios para disfrutar de la jubilación.
Hemos querido señalar cuatro retos: el envejecimiento, el despoblamiento de las zonas rurales, la pérdida de peso demográfico y económico de las áreas industriales maduras y la capacidad de absorción de la emigración mayor de 65 años. Pero créanme, no son los únicos retos demográficos a los que la sociedad española hará frente a corto y medio plazo. Por tanto, es hora de planificar, gestionar y actuar, por este orden, para poder afrontar el reto con garantías de éxito para el futuro de las sociedades que ya habitamos estos territorios, así como para aquellas que lo habitarán.