El Castillo de Fiestas de Cocentaina vuelve a cobrar vida ante el Palau
Cocentaina ha empezado a transformar ya su paisaje urbano para dar la esperada bienvenida a sus Fiestas de Moros y Cristianos en honor a San Hipólito Mártir. Los festejos vivirán sus días grandes entre el 12 y el 15 de agosto pero mientras llegan esas jornadas se ultiman todos los preparativos para dejar lista la ornamentación que engalana las calles por donde discurren los principales actos de la trilogía.
Una de las señales que advierte de la llegada inminente de la Festa es el montaje del Castillo en la Plaza del Pla, un enclave que sirve de escenario para las Embajadas de las tropas de la cruz y de la media luna. La fortaleza salió hace unos días del letargo de dos años al que ha estado sometida, a causa de la pandemía, y la estructura de hierro empezó a tomar forma el pasado fin de semana despertando la curiosidad de muchos vecinos. Durante los últimos días se han intensificado los trabajos de colocación de las maderas que dan forma al Castillo y a finales de esta semana ya es visible la práctica totalidad de la estructura de la torre junto a las almenas que lo coronan. El Castillo estará totalmente montado antes de que acabe el mes de julio y vuelve a situarse ante edificios emblemáticos como el Palau Comtal o el Monasterio de la Mare de Déu del Miracle «nos hemos alegrado muchísimo de volver a verlo porque desde 2019 que no estaba instalado en el centro de la plaza. Que haya comenzado su montaje es una clara señal de que llegan los días de las Fiestas y una vez esté finalizado el proceso comenzará la colocación de las banderas que engalanan el Passeig del Comtat o las fachadas del Palau. La idea es que todo esté listo para la primera semana de agosto«, apuntaba al respecto el concejal de Fiestas; Octavio Cerdà.
Al margen de la instalación del Castillo se ha previsto que este viernes arranque la colocación de la enramada extraordinaria que iluminará las noches de Fiestas. La misma vuelve a repartirse por el Passeig del Comtat, El Pla y las calles Biste Estaña, Pare Agulló y Mare de Déu del Miracle.