El Convento de Cocentaina ha rendido homenaje a San Francisco en esta Navidad
El Convento de los Padres Franciscanos de Cocentaina ha rendido homenaje a San Francisco de Asís durante las Fiestas de Navidad que están a punto de terminar. Los religiosos han recordado que se cumplen 800 años desde que el fundador de la orden representara el primera Belén de la historia y han hecho un guiño a esta efeméride en el altar mayor. Allí se monta siempre durante el Adviento un original conjunto que representa a la Virgen María sobre la mula, camino de Belén, y junto a San José. Cuando llega el 24 de diciembre el mencionado conjunto se reorganiza con la Virgen María y San José, junto a la cuna del Niño Jesús, y de esta forma el singular Nacimiento preside todas las celebraciones religiosas de estos días. Este año se le ha incorporado también la figura de San Francisco de Asís en recuerdo de esos 800 años del primer Belén de la historia.
Al margen de esto, los frailes; con el apoyo de la Orden Franciscana Seglar y los integrantes de las Cofradías de Semana Santa que pertenecen al mismo Convento, han preparado un monumental Belén en el que se recrean las escenas bíblicas más significativas relacionadas con el Nacimiento de Jesús.
De esta forma se puede ver la anunciación a la Virgen María, el camino hacia Belén, el mismo Nacimiento, la adoración de los pastores, la huida a Egipto o la visita de los Reyes Magos de Oriente. Todo ello sin dejar de lado un amplio abanico de representaciones costumbristas e incluso la presencia de una gran maqueta que reproduce con todo detalle el edificio del mismo Convento de la capital del Comtat “esto es lo que quizás más llama la atención porque vemos el campanario de la iglesia o el huerto trasero con la clásica ‘Fonteta dels Frares’. También aparecen frailes cultivando la tierra o haciendo diferentes quehaceres. Ha quedado muy bien y a la gente le está gustando mucho”, indica Fray Fernando Fuertes; Guardián de la Comunidad Franciscana de Cocentaina. A lo comentado anteriormente, se le une la recreación de la gruta de Greccio en la que San Francisco de Asís representó el Nacimiento con carácter ficticio el 24 de diciembre de 1.223. Finalmente, en el altar mayor, han sido colocadas unas grandes figuras de San José, la Virgen María y el Niño junto a la imagen de San Francisco de Asís.
El citado Belén se puede ver en la capilla de la comunión de la iglesia conventual antes y después de las misas diarias.