La pobreza también está en las dificultades para acceder a Internet
Acceder a Internet se ha convertido, a día de hoy, en una práctica habitual. Leer noticias, consultar las redes sociales, aplicar para un empleo o, incluso, estudiar. Sin embargo, una acción tan básica como estar conectado a la red es algo que mucha gente en nuestra ciudad no puede hacer.
La brecha digital -es decir, la desigualdad en el acceso a Internet- es una de las principales formas de pobreza hoy en día. Una realidad que incide en la búsqueda de empleo, por ejemplo, pero también en la educación de los más jóvenes. «Ahora mismo tenemos mucha población migrante que tiene poca capacidad para acceder a Internet. Hoy por hoy todo lo hacemos a través de aplicaciones informáticas. Para acceder al sistema sanitario se requiere una aplicación informática. Y ahora mismo no tienen esos conocimientos ni recursos», ha explicado Mónica Guillem, trabajadora social de Cruz Roja Alcoy, durante el ‘Tiempo de Análisis’ de este martes de Cope Alcoy.
Para atender a las personas que acuden a Cruz Roja con una necesidad como esta, se están desarrollando diferentes proyectos. «Estamos trabajando con un grupo de apoyo escolar para niños de 1º a 61 de Primaria a través de tablets para que puedan acceder al sistema educativo», cuenta Guillem. Y es que, a día de hoy, la mayoría de colegios trabajan a través de las nuevas tecnologías. «También hacemos formaciones tanto para empleo como para potenciar el bienestar personal en las que se trabaja con tablets. Así les explicamos su funcionamiento».
Precisamente las dificultades en el acceso a Internet influyen en la educación de los más jóvenes. Y esto está estrechamente relacionado con la pobreza. «En datos de la tasa AROPE, cuando el nivel educativo es equivalente a la Primaria, la pobreza sube al 34 %. Sin embargo, cuando el nivel educativo es equivalente a estudios superiores, la tasa se reduce a un 14%», apunta Pablo Granados, director de Cruz Roja Alcoy.
Podemos decir, por tanto, que hay una relación causa-efecto entre el nivel académico y la tasa de pobreza. «La pobreza que más se nota es la pobreza juvenil», asegura Juanjo Garrido, director del Economato de Cáritas Interparroquial de Alcoy.
Imagen: Cope