Las Franciscanas dejan Muro tras más de 135 años de servicio
Las Hermanas Franciscanas de la Inmaculada Concepción dejan la Casa de la Beneficencia de Muro para ser trasladadas a otras dependencias de la Congregación tras más de 135 años de servicio en el municipio. La decisión, según explicó la Parroquia de la localidad recientemente en un comunicado, viene motivada por la falta de vocaciones que impiden que la mencionada Congregación pueda seguir prestando servicio a las personas que moran en la Residencia de la Virgen de los Desamparados.
El párroco de San Juan Bautista de Muro asegura que nada más conocerse la noticia mantuvieron una reunión con la Madre Provincial de las Hermanas para evitar el cierre la Casa de la Beneficencia y señala que no fue posible alcanzar un acuerdo. Todo ello debido, tal y como remarca Don Diego Ferrándiz, a que el contexto actual de la Congregación impide que nuevas monjas puedan llegar a residir en el Asilo:
Desde la Parroquia detallan que las monjas ya no se encargaban de atender de manera directa la residencia de ancianos, puesto que esta gestión depende de Conselleria, y ponen en valor la importante labor que las religiosas han desempeñado en Muro a lo largo de esos cerca de 140 años que han estado presentes en el pueblo. Además inciden en que de ellas dependía también el funcionamiento diario de la Ermita de la Virgen de los Desamparados, tarea que ahora asumirán desde la Cofradía de la Mare de Déu.
La despedida de las religiosas se ha confirmado este mediodía para mañana miércoles 15 de junio en una misa solemne a partir de las 11:30h en la misma Ermita de la patrona murera. Tras le eucaristía, y de una comida de hermandad, Sor Josefina marchará a Zaragoza, Sor Encarnación a la Alquería de la Condesa, Sor Luisa a Moncada, y Sor María Rosa volverá en breve a la India.