ajuste horario

Con la llegada del otoño, España se prepara para un ritual que cada año por estas fechas genera cierta controversia: el cambio de hora. En 2024, este ajuste se llevará a cabo en la madrugada del 26 al 27 de octubre, cuando a las 3:00 de la mañana los relojes retrocederán una hora, regresando a las 2:00. La curiosidad la volvemos encontrar en Canarias, donde el cambio se realizará una hora antes.

Aunque muchos dispositivos tecnológicos ajustarán automáticamente la hora, los relojes analógicos requerirán atención manual. Este cambio busca optimizar el uso de la luz natural y reducir el consumo energético, un tema que ha generado debate entre expertos debido a sus efectos en la salud.

La Sociedad Española del Sueño (SES) advierte que el ajuste puede desincronizar nuestro reloj biológico, provocando irritabilidad, insomnio y fatiga. La adaptación al nuevo horario puede tardar hasta diez días, aunque generalmente no excede un día. Sin embargo, el cambio al horario de invierno es considerado menos disruptivo que el de verano, ya que se alinea mejor con los ciclos naturales de luz y oscuridad.

Para facilitar esta transición, los expertos recomiendan ajustar gradualmente los horarios de sueño y comida en los días previos al cambio. También sugieren exponerse a la luz solar por las mañanas y evitar estimulantes antes de dormir.

A pesar del debate sobre si mantener o eliminar este ajuste bianual, actualmente no hay planes inmediatos para suprimirlo. La directiva europea que regula estos cambios sigue vigente hasta al menos 2026. Aunque algunos estudios cuestionan el ahorro energético real que se obtiene con este sistema, el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) estima un potencial ahorro significativo en iluminación. Así, mientras los españoles se preparan para ajustar sus relojes una vez más, persiste la incertidumbre sobre si este será el último cambio de hora o si continuaremos con esta particular tradición en los años venideros.

Imagen: COPE