Una cápsula del tiempo cerrará la conmemoración del Centenario de la actual iglesia de San Jorge de Alcoy
La Asociación de San Jorge de Alcoy tiene previsto cerrar la conmemoración del centenario de la actual iglesia del patrón con una última actividad similar a la que se hizo hace casi 100 años. Se trata de la colocación de una cápsula del tiempo en los cimientos del templo y en la que se guardarán diferentes objetos que aporten los alcoyanos.
El pueblo de Alcoy podrá participar mediante la entrega de un objeto material y/o virtual que será incorporado en la mencionada cápsula del tiempo, la cual quedará sellada y sepultada en un lugar determinado del edificio. Este estará debidamente señalado para la vista, dejando constancia que la veneración a San Jorge sigue presente 100 años después de tal enorme acontecimiento «dicha piedra que es un cubo de cincuenta centímetros de lado, se halla colocada en los cimientos de la fachada lateral recayente a la calle San Blas y a tres metros de distancia de la fachada principal, y en ella se deposita una caja de plomo que contiene: un ejemplar en pergamino de la presente acta; dos medallas de plata de San Jorge de las que usa actualmente la Asociación; dos fotografías del Patrono, una de cada una de las imágenes que hoy se veneran en su Iglesia; una Crida o llamamiento a los alcoyanos para esta festividad; una serie de monedas de plata , de cinco, dos y una y media pesetas, que por no haberse acuñado en España este año llevan la fecha de 1888, 1906, 1910, 1911, respectivamente y tres de cobre de u céntimo acuñadas en este año; un ejemplar de los periódicos locales el “Heraldo de Alcoy”, “La Defensa”, “El Combate” y “La Lealtad”, fechas de hoy los dos primeros, de ayer el tercero y veinte de este mes el cuarto…» es lo que reza el texto de la convocatoria de hace cien años.
Hasta el 15 de julio, en las oficinas del Casal de Sant Jordi, se recepcionarán los detalles que las alcoyanas y alcoyanos deseen dejar en esta cápsula del tiempo. Indicar que fue el 23 de noviembre de 1913 cuando se enterró en los cimientos de la actual iglesia dedicada al patrón un prisma con una caja de plomo.